El Tribunal de Casación Penal absolvió a Néstor Pinta, el entrenador de remo de Carmen de Patagones que había sido condenado a la pena de cuatro años y seis meses de prisión por encubrir el delito de abuso sexual de su padre Aldo.
La decisión fue tomada por los jueves de la Sala IV, Carlos Ángel Natiello y Mario Eduardo Kohan, quienes confirmaron que fue “más que claro” que hubo delito por parte de Pinta padre, pero que “bajo ningún concepto” puede asegurarse la participación de su hijo en los hechos.
La defensa de las denunciantes, María Fernanda Petersen, advirtió que va a apelar ante la Suprema Corte de Justicia.
Los hechos sucedieron entre 2011 y 2016, en perjuicio de al menos dos jóvenes que asistían a la Escuela Municipal de esa disciplina, y que tenían en esa etapa 14/15 años y 16/19.
Según el testimonio de Victoria C., previo a los entrenamientos Néstor Pinta las llevaba a merendar a la casa de su padre y en ese lugar se producían los abusos.
Se trataba de una especie de ritual en el que Aldo las hacía ingresar a su cuarto para “sacarles las tensiones” a través de masajes. Siempre cuando su esposa no estaba.