Momentos de tensión se vivieron esta mañana en el Hospital Municipal Eva Perón de Punta Alta.
En el marco del segundo día de un paro de 72 horas convocado por el Sindicato de Municipales, autoridades sanitarias convocaron a empleadas ajenas a la institución para hacer la limpieza.
Hasta allí llegaron miembros del gremio y el propio titular, Marcelo Sottile, para impedirlo.
Ante esa situación, el secretario de Salud, Carlos Gabbarini dio aviso a la policía.
“Increíblemente el líder sindical, con la violencia que lo caracteriza, me discutió que la limpieza no era esencial, que no existía la infección intrahospitalaria y que se podía trabajar igual. La gente del hospital no podía creer lo que escuchaban. La policía debió intervenir para que dejen trabajar al personal contratado y retirar de las instalaciones del hospital a los representantes del sindicato”, explicó.
El funcionario argumentó además que el quirófano se encuentra activo, y que hay pacientes internados en terapia intensiva.
“Esta es la manera de manejarse, a través de la violencia, el apriete y la amenaza y no voy a ceder a estas situaciones patoteriles”, advirtió.
Incluso el bloque oficialista de Juntos por el Cambio criticó el manejo sindical y mediante un comunicado, invitaron al resto de las fuerzas políticas “que se expresen en el mismo sentido”.
“El sindicato pone en riesgo la salud de los rosaleños”, alertaron.