El gobierno nacional anunció el pase a la fase 4 de la cuarentena para todo el país, a excepción de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
El anuncio del presidente Alberto Fernández significa, al menos hasta el 24 de mayo, la flexibilización del aislamiento y un comienzo progresivo de actividades, tanto laborales como personales.
Puntualmente significan nuevas excepciones provinciales, restricciones locales, y movilidad de la población de hasta el 75 %, entre otras.
Durante su discurso, acompañado por el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aclaró que la prioridad es la salud, como respuesta a los reclamos por la apertura total para la mejora de la economía.
“No me van a torcer el brazo, voy a cuidar antes que nada a la gente. Creo que convocan con gran imprudencia”, se quejó Fernández, quien destacó su “suerte” de “gobernar con gobernadores que valoro mucho porf sus trabajos, también con los opositores”.
Tras exponer números sobre contagios y muertes, y la comparación con otro países, Fernández dijo sentir un “enorme orgullo” por el comportamiento de los ciudadanos durante la pandemia, y consideró que el país está “logrando los objetivos” planteados para controlar el avance de los contagios.
