Consustanciado con el reclamo de los vecinos de Villa Iris, el intendente de Puan, Facundo Castelli, se acercó a la manifestación en contra de la presencia en la localidad de Gustavo Ravainera, condenado por el doble crimen de Victoria Chiaradía y Horacio Iglesia en el año 2000 y que fue beneficiado con la prisión domiciliaria por problemas de salud.
El jefe comunal acompañó la carta de enviada a la justicia para rever la situación en favor de el “Lagarto”, que hoy se encuentra en el domicilio de su hermana, en calle Tres Lomas al 300.
“Estoy sorprendido y comprendo la intranquilidad de la gente de tener que vivir con un asesino”, dijo Castelli quien comprometió su respaldo y adelantó que el Concejo Deliberante podría declararlo persona no grata.
Con una manifestación en la ex Terminal, con aparición en medios periodísticos, y en redes sociales, un grupo importante de habitantes consideran a Ravainera como “una lacra”, que “no es bienvenida” y que además “jamás vivió acá”.
Claudio Brun, a cargo del Juzgado de Ejecución Penal Nº 1, tomó la decisión luego de que se le detectara un “cáncer de pulmón avanzado” y de que “seis informes médicos advirtieran de que el ámbito carcelario no es el propicio”.
“Está en etapa terminal, esas son las palabras que han utilizado. Ya venía rechazándole este beneficio, pero en esta oportunidad es diferente”, dijo el magistrado a la prensa.
Roberto Chiaradía, padre de Victoria, consideró que Ravaneira “no debería salir de la cárcel hasta que se muera”.