Un médico que revisó a Daiana Abregú antes de que la hallaran ahorcada el 5 de este junio en una comisaría de Laprida, a la que había sido trasladada presuntamente por causar disturbios en la calle en estado de ebriedad, dijo que no advirtió que la joven hubiera ingerido alcohol y que estaba “tranquila”.
La declaración está siendo analizada por la justicia, que también evalúa incorporar un audio que sugiere que pudo haber sido asfixiada con una bolsa en la cabeza.
El profesional, Diego Scabuzzo, que la revisó luego de que fuera detenida y antes de que la policía la llevara a la comisaría, contrarió la versión policial en la declaración que brindó al fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción Especializada en Denuncias de Delitos a Funcionarios Públicos y de Policías de Azul, Juan Ignacio Calonje.
“Dijo que no pudo oler alcohol porque tenía barbijo y que Daiana no se encontraba agresiva, solo lloraba”, relató una fuente de la investigación. La declaración se sumó a la causa en las últimas horas, al igual que los teléfonos celulares de cuatro de los policías implicados en el hecho, que fueron secuestrados para ser peritados.
La justicia evalúa también un audio grabado por la hija de 11 años de otro médico, identificado como Omar Baquini, quien constató la muerte de Abregú en la comisaría.
“Papá trabaja en el hospital y lo que le informó el jefe es que Daiana no se ahorcó, no murió ahorcada, sino que la asfixiaron con una bolsa en la cabeza. Se dice que a la gente que está alterada o algo le ponen una bolsa en la cabeza para tranquilizarla y acá se pasaron de vuelta y la mataron…”, diría la niña en la grabación, enviada por ella a unas amigas, que su propia madre aportó a la justicia.
Sergio Roldán, abogado de la familia Abregú, dijo que “Baquini es un médico de guardia que acudió a la comisaría cuando le avisaron de la muerte de Daiana”, y que luego “hizo un informe que no cierra”.
Fuente: Página 12
