La Administración Federal de Ingresos Públicos desarticuló un conjunto de maniobras de comercialización fraudulenta de más de 4770 toneladas de granos, que equivalen a unos 160 camiones con acoplado.
Los procedimientos realizados por la Dirección General Impositiva permitieron detectar graves irregularidades en distintas plantas de acopio de Guaminí, Huanguelén y Espartillar.
Los operadores de la cadena agrocomercial recurrían a distintas maniobras fraudulentas como la falta de registración del movimiento de los productos, faltantes de stock, así como la ausencia de documentación respaldatoria para el ingreso de la mercadería a las plantas de acopio.
Los inspectores de la DGI realizaron tareas de cubicaje para determinar capacidad de acopio y el cotejo documental y registral del cereal almacenado en las distintas plantas.
Como resultado de esos procedimientos se decidió interdicatar 484 toneladas de maíz y soja al corroborarse la falta de documentación respaldatoria.
Asimismo, fue posible constatar y sancionar los faltantes en el stock de acopio por 4.300 toneladas de trigo pan, cebada, maíz, alpiste, trigo, avena y soja. El valor de mercado de todo el cereal y granos fiscalizados por la DGI en el sur de la provincia de Buenos Aires alcanza a los $ 236.368.000, de acuerdo a las cotizaciones de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca.