Miles de peces aparecieron muertos en la orilla de la laguna San Antonio, en el partido de Benito Juárez.
El fenómeno obligó a las autoridades a prohibir el ingreso para la pesca y todo tipo de actividad deportiva o recreativa.
Mientras personal de bomberos y municipales realizan la limpieza del lugar, se especula que el fenómeno se debió a la elevada temperatura del agua y la falta de oxígeno, aunque de todos modos se espera el análisis de especialistas.
La laguna San Antonio ocupa 1000 hectáreas y tiene una profundidad de 1,7 metros, motivos que atraen a pescadores para la extracción de pejerreyes, bagres y dientudos, como así también para el nado y otros deportes náuticos.