La Legislatura de la Provincia aprobó la ley impositiva impulsada por el Ejecutivo que encabeza Axel Kicillof.
Se logró luego de un miércoles extenso, en el que primero se analizó el proyecto en Diputados, se giró al Senado, que hizo modificaciones y devolvió a la Cámara baja, donde por la noche consiguió su aval definitivo.
Durante los debates en ambos recintos, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio volvieron a tener posiciones enfrentadas y hubo críticas a la gestión de María Eugenia Vidal, y planteos en relación al proyecto oficialista.
Según se informó, los cambios realizados fueron una reducción de partidas que abarcan el 75 % de suba del impuesto inmobiliario urbano (de 2.600.000 a 600.000), y un descuento por abonar el impuesto en un sólo pago, que subirá del 20% al 25%.
También que el incremento de los ingresos brutos para la fabricación de medicamentos quedará en el 1,5%, contra la idea de Kicillof de llevarlo al 3,5%.
En tanto que los ingresos brutos para los servicios profesionales, se mantendrán en 3,5% en vez de irse al 4,5%.
Ésto provocó malestar en el propio Kicillof, quien criticó los cambios, consideró que pueden desfinanciar a la administración, pero que su aprobación era necesaria para poder gobernar.
