El Ejecutivo de Coronel Suárez le pasó la nueva administración el pedido de aumento salarial que reclaman los trabajadores municipales.
Mediante un comunicado, la gestión saliente de Roberto Palacio, manifestó que están “limitados” e “inhabilitados” para “incrementar gastos corrientes de carácter permanente”.
De ésta manera, deberá resolver el pedido el intendente electo Ricardo Moccero, quien asumirá el 10 de diciembre y advirtió que en encuentros con las áreas de Hacienda y Tesorería, que la comuna está “en una situación grave”.
“Cada día que pasa, cada reunión que tenemos con el contador del municipio Leandro Pérez, nos asusta un poco más: su última frase fue que no nos va a quedar ni para comprar una caja de fósforos”, señaló.
Por su parte, el gremio aclaró mediante nota, firmada por el Secretario, Rubén Allende, que la última movilización se debió a que se encuentra en una paritaria salarial “que ya debería haber cerrado después de 3 meses de deliberación, que en estos 3 meses el Ejecutivo aún no ha presentado propuesta de recomposición salarial, que debe incorporar en el presupuesto municipal 2020, antes de elevarlo al Honorable Concejo Deliberante, con fecha límite el 30 de noviembre de 2019”.
El comunicado del gobierno saliente:
Ante el reclamo sindical llevado adelante por un grupo de Delegados del Sindicato de Trabajadores Municipales, y que innumerables problemas ocasiona a los vecinos contribuyentes y a la prestación de servicios que debe brindar esta administración en las distintas localidades del distrito, informamos que el mismo se fundamenta claramente en la intención del gremio de lograr un incremento salarial para el año próximo, ya que los acuerdos paritarios celebrados por esta administración rigen hasta el 31 de diciembre de 2019 y se encuentran plenamente vigentes en base a lo oportunamente pactado.
La responsabilidad política de las actuales autoridades municipales en la elaboración de un presupuesto que deberá ejecutar el próximo gobierno entrante, y los términos de la ley 13295 (Ley de Responsabilidad Fiscal), hacen que esta administración se encuentre limitada en su accionar e inhabilitada para incrementar gastos corrientes de carácter permanente debido a su próxima finalización en el mes de diciembre.
Esta posición también es basada en la falta de previsión de fondos provinciales coparticipables y ello ha determinado que hasta la fecha no se haya incorporado suma alguna destinada a aumentos salariales en la elaboración previa del presupuesto para el año próximo ante ese desconocimiento.
Atento que el presupuesto 2020 deberá ser finalmente votado por el próximo Honorable Concejo Deliberante, que entrará en funciones el próximo 10 de diciembre, y ejecutado por la administración que asumirá ese mismo día, cualquier incremento salarial para el nuevo año deberá ser ratificado por las nuevas autoridades, siendo esa la responsabilidad que le cabe a esta actual administración municipal y en base a ello es que estamos actuando.
