Unidad Ciudadana propuso declarar por un año la Emergencia Social y Alimentaria en Coronel Rosales.
La iniciativa se fundamenta en “el déficit alimentario y necesidades básicas insatisfechas que vastos sectores de la sociedad están padeciendo a lo largo del distrito producto de las políticas económicas aplicadas por el gobierno nacional, provincial y municipal”.
El proyecto de ordenanza contempla la solicitud para que se refuercen “todos los programas y recursos provistos por la Secretaría de Desarrollo Social, especialmente aquellos vinculados a la alimentación, garrafa social, frazadas, colchones y materiales de construcción”.
Según el concejal Rodrigo Sartori, “hay un crecimiento sostenido de personas en situación de no lograr alimentarse adecuadamente, ni cumplir con todas las comidas diarias o directamente no ingerir ningún alimento sólido en el día”.
El bloque kirchnerista considera que las políticas municipales no son suficientes para contener el tejido social “cada vez más deteriorado” y que la bolsa de alimentos secos es insuficiente “y la tarjeta para acceder a alimentos frescos a través de la Cooperativa Obrera no es ofrecida por la Secretaría de Desarrollo Social en gran parte de los casos motivo por el cual la mayoría de las familias desconocen este beneficio”.
El edil señaló además que las garrafas sociales y recursos como tirantes, chapas, membrana, colchones, frazadas “no son cubiertos a demanda y la gente no puede costearlos. En muchos de los casos, los pocos recursos con los que cuentan las familias se ven dañados luego de los días de lluvia por no tener los techos o cielorrasos en las mínimas condiciones de mantenimiento”.
Además, subrayó que “los trabajadores informales y/o en negro son los principales afectados producto de la merma del poder adquisitivo que, también, afecta a los trabajadores formales que ya no requieren sus servicios (pintores, albañiles, jardineros, etc.). Esta situación no solo tiene implicaciones a nivel individual, sino que también repercute en la esfera familiar”.
Según Sartori, las políticas macroeconómicas del gobierno de Mauricio Macri acompañadas por María Eugenia Vidal y el intendente Mariano Cecilio Uset “muestran su mayor grado de expresión en el aumento exponencial de familias que día a día van al basural, siendo este el último recurso que les queda para poder sobrevivir sumergidos en la exclusión social”.
