Región Sanitaria instó a los intendentes a tomar decisiones con el objetivo de disminuir lo máximo posible la circulación de los vecinos.
El director adjunto de la entidad, Laureano Alimenti, pidió en ese sentido una “postura más enérgica” en las políticas de disminución de la movilidad urbana. Y a su vez, en el uso de los dispositivos tales como la comunicación, testeos de detección precoz, el aislamiento precoz a través de los centros de telemedicina y el control focalizado para prevenir contagios.
Según explicó, este requerimiento se debe a que existe una inusual velocidad de contagios de coronavirus y es necesario frenarla.
“La segunda ola no es inminente sino que ya llegó y es momento de reducir al máximo nuestros movimientos y tomar conciencia del momento que estamos atravesando”, dijo el funcionario, quien pidió, para cambiar esa tendencia de contagios, “un cambio de comportamiento social” y volver a retomar las medidas individuales que se tomaron en el 2020, “restringiendo las actividades sociales que tenemos, además de que se acompañen las medidas que se van a empezar a difundir desde la Provincia”.
En ese sentido, también convocó a la población a anotarse para recibir la vacuna, ya que uno de los criterios que aplica el Ministerio de Salud bonaerense para distribuirlas, es la demanda.
“Debemos potenciar la inscripción, porque miran cuántos anotados hay y en función de eso, más otros factores, envían partidas”, agregó.
Actualmente entre los 15 distritos que componen la Región Sanitaria I, hay 81 mil vacunados, y esta semana es una de las que mayores dosis se aplicarán.
“Si bien tenemos cierto margen, hay una complejidad en todos los hospitales. Y para darle ventaja a la vacunación, tenemos que ganar tiempo y cuidarnos al máximo”, sintetizó.
